El mes de octubre es el mes dedicado al rosario y a las misiones en Corea y en todo el mundo. Durante el mismo, en cada parroquia se insiste en la vocación misionera de la Iglesia…. “vayan por todo el mundo y hagan a la gente mis discípulos…”(Mt.28,19). Este mandato misionero de Cristo es la vocación de todo cristiano que verdaderamente se considere como tal.
Con motivo del Domund (domingo de las misiones), el periódico católico “Peace times” publicó un artículo en el que da a conocer como el número de sacerdotes diocesanos enviados a trabajar como misioneros al extranjero por un tiempo, se ha doblado después de 8 años en que se hizo el primer envío. En 2001, según el artículo, salieron a trabajar a otros países 26 sacerdotes coreanos, en octubre de este año el número es de 54. Por diócesis el número también se ha doblado de 6 a 12 las diócesis que han enviado sacerdotes, entre ellas es notable la de UIYANGBU fundada apenas hace 5 años y que es la que tiene el mayor número de sacerdotes trabajando en misiones, 11 en total. Le siguen las de Taejon con 8, Suwon y Taegu con 7, la Arquidiócesis de Seúl tiene 6 sacerdotes haciendo labor misionera. Se confía en que en el futuro su número irá creciendo, en la actualidad la Arquidiócesis de Taegu se prepara para enviar sacerdotes a África y a Tajigistan. La diócesis de Jeju envió este año por primera vez un sacerdote a trabajar en Kyoto, Japón.
En el mismo diario apareció el testimonio del P. Han Yeong-wan (Juan) quien, como seminarista en Corea se enroló en el seminario de Guayaquil, Ecuador, era el año de 1985, terminó sus estudios y fue ordenado en el año de 1988 y ha estado trabajando como sacerdote en ese lugar desde entonces, 5 años en la selva, 2 en la región del Amazonas con 5 tribus nativas y los últimos 15 años, desde 1995, como pastor de la Parroquia del Sagrado Corazón, de dicho lugar. Comenta el padre que su parroquia es del tamaño de la Isla de Jeju, la más grande en Corea y que cuenta con 40,000 fieles y 60 estaciones misioneras con vías de comunicación muy inadecuadas. El padre tuvo que regresar a Corea el pasado mes de mayo por problemas de salud, por lo que obtuvo un año sabático de parte de su ordinario, él espera regresar lo más pronto posible a continuar con su trabajo.
La Iglesia coreana ha enriquecido su fe y progresado gracias a la sangre de miles de mártires derramada durante el tiempo de las persecuciones y a una organización sólida que tiene sus raíces desde su fundacion, hace mas de dos siglos. Hay quien opina que gran parte de la evangelización en Asia se deberá a la Iglesia coreana.
Actualmente hay un seminario de misiones fundado en 1975 que cuenta con 56 sacerdotes y 34 seminaristas, tienen misioneros en Cambodia, China, Papua Nueva Guinea, Filipinas, Rusia, Taiwan y Mozambique.
Pidamos al Señor por las misiones y los misioneros y recordemos que nuestra vocación como cristianos es misionera por lo que hay que llevar el Evangelio a los que nos rodean.
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